La tectónica de los pliegues en arquitectura sugiere ahora libertad, continuidad, indeterminación, ambigüedad, ductilidad y está abierta al cambio y a lo efímero. Una exploración en este tema es un modo de asumir la estructura del edificio de manera que su morfología responda al movimiento aparentemente aleatorio de sus flujos.
El plegamiento, o curvatura, puede darse en cualquiera de los límites del espacio, es decir pisos, bordes, cobertura, etc. y más bien en la continuidad de todos ellos ya que esta tectónica busca hacerlos indistinguibles, pretende hacer ambiguos estos conceptos fijos y sus relaciones.